Son varios ya los casos similares a este, en el que una mujer da a luz a un bebé asegurando que no sabía que estaba embarazada.
En esta ocasión se trata de Belinda Waite, una joven de 21 años, que dio a luz a una niña tres horas después de que los médicos le confirmaran que estaba embarazada.
Lo curioso del caso es que no le dijeron que estaba de nueve meses, sino que estaba de tres y le sugirieron que pidiera hora con el ginecólogo una semana después para iniciar los controles del embarazo.
Tres horas después, casi sin avisar, Belinda paría a su hija en casa, asistida por su madre.
Cada vez que se lee una noticia así se tiende a pensar en lo inverosímil que parece, ya que parece increíble e imposible que una mujer no sepa que está embarazada si tenemos en cuenta que el bebé se mueve, que la mujer tiene síntomas como náuseas, aumento del tamaño de la barriga (evidente), ausencia de menstruación (evidente también), un cambio en el gusto y en el olfato, etc. y ella, probablemente, sí sentía cosas similares, pero en varias visitas hospitalarias, durante nueve meses, le diagnosticaron de Síndrome de Intestino Irritable y ni a ella ni a los médicos se les debió ocurrir que quizás estaba embarazada.
En Navidad, de hecho, hubo una nueva oportunidad para que los médicos o la misma madre sospecharan un posible embarazo, ya que volvió al centro de salud a visitarse porque se notaba las manos y los pies hinchados. En esta ocasión le dijeron que podría ser una reacción alérgica.
Según explica la reciente madre, no tuvo ningún tipo de precaución durante el embarazo, básicamente porque no sabía que estaba embarazada. Estuvo en España montándose en montañas rusas y tirándose en los toboganes de los parques acuáticos, comió “todo lo que no tendría que haber comido y hasta me atropelló un coche. Por suerte no fumo y dejé de tomar alcohol porque me hacía sentir mal”, comentó.