Un hotel para ir de compras Veinte creadores han optado por un hotel para vender sus prendas a un precio único
Varios modistos han decidido "tomar" un hotel de Barcelona y vender allí sus creaciones. Habitaciones con vistas y con ropa de diseño Y el cuarto de baño como probador. Y en la cama se pueden encontrar los "chollos".
Aunque no lo parezca, son habitaciones de un hotel. Por un día las suites se convierten en pequeñas tiendas donde los diseñadores ponen a la venta su colección.
Veinte creadores han invadido una planta entera de un hotel de Barcelona, donde aquí la ropa abandona los clásicos escaparates y estanterías. La ropa se coloca sobre la cama y los zapatos sobre las mesillas de noche. Las gangas se esconden en cualquier rincón.
De habitación en habitación o, lo que es lo mismo, de tienda en tienda: aquí se puede ir de compras lejos del bullicio de las calles más comerciales y disfrutar poniéndose zapatos en una suite de lujo. Algunos probadores están en la ducha.
Atrevidos minishorts de polipiel o camisetas exclusivas a precio único: recorrer estas impecables habitaciones boutique quizá sea la mejor manera de comprar sin agobios.