Desenpolvando unas revistas de cocina he encontrado este mini reportaje de setas que me gustaría compartirlo con vosotras.
1. Comprar:: Elígelas de tamaño mediano; las grandes suelen resultar secas. Ponlas en la nevera nada más comprarlas y consúmelas lo antes posible.
Pôr su alto contenido en agua se deterioran o enmohecen fácilmente.
2. Como limparlas: Retira la aprte terrosa del tallo y límpialas con un trapo húmedo. No conviene dejarlas en remojo; su carne , muy porosa, absorbe agua, por lo que pierden sabor y cambia su textura.
3. Nutrición: De bajo valor nutritivo, sólo aportan 25 calorías por 100 g. Son ricas en vitaminas, A, B1 y B2 y sales minerales como el potasio, fósforo, sodio y calcio.
No es conveniente comerlas en grandes cantidades por su alto contenido en metales pesados.